Definiremos como peculiar mi estilo de viaje, en realidad lo que pasa es que soy un empanado y un cabezon, toda una contradiccion, hay momentos en los que llego cansado a un lugar y con tal de conseguir una habitacion decente sin tener que andar inspeccionando hotel por hotel dejo que algun comisionista me ahorre el trabajo, en otros momentos sin embargo incluso por cantidades insignificantes soy capaz de hacer 30 km andando...
Entrar en Etiopia por tierra fue una experiencia interesante, desde Khartoum habiamos cogido el primer bus del dia hasta el pueblo mas cercano a la frontera, a un par de horas de esta, todo un lujo que no creo vuelva a encontrar en este continente, bus nuevo con aire acondicionado y carretera asfaltada, el sur de Sudan empezaba a parecerse al paisaje etiope que recordaba en la carretera que va al sur desde Addis aunque mucho mas seco.
Llegamos al pueblo y contratamos un pick up en el que fuimos unas 10 personas atajando por caminos de tierra las pocas revueltas del camino asfaltado, la frontera por el lado sudani era de lo mas correcta compuesta por pequenhos edificios oficiales con toda la infraestructura necesaria, pero pasar el puente y entrar en Etiopia fue como entrar en un mundo de otros tiempos, el registro y sellado del pasaporte se hacia en una cabanha de entre tantas con una banderita en la puerta de ojalata al que llegabas por un camino lleno de basura y la inspeccion de equipaje se hacia en una plazoleta de tierra donde estaban en corrillo los funcionarios pasando de todo, cuando me dirigia hacia ellos me miraron de reojo y pasaron de inspeccionar nada.
Llegamos casi de noche y no tenia ni idea de donde la pasariamos, Metena es un poblado de chozas donde en concepto de hotel significa un restaurante donde disponen de habitaciones para que los clientes mantengan relaciones con las prostitutas que lo frecuentan, oscurecia y con las prisas nos dejamos acompanhar por el comisionista de turno que nos llevo a las habitaciones mas decentes del pueblo.
El japones con el que cruce Sudan cargaba una mochila de 30 kg y viajar con el suponia andar esperandole a cada rato, ademas se habia estudiado la guia al completo y tenia apuntado en que y cuanto iba a gastar cada centimo, la verdad es que gracias a eso me registre en Sudan evitando grabes problemas con las autoridades, conseguir cualquier transporte me costaba un buen rato de explicaciones acerca de por que estaba pagando mas de lo que ponia en el libro, pero al final me di cuenta que me seguia en todo y lo que hice fue arreglarlo todo sin consultarle, a la noche ya le explicaria los porques.
Empece a llevarme bien con el una vez en Etiopia cuando con la primera engira nos tomamos unas cuantas cervezas, dada su cultura si el amigo quiere tomarse una mas ellos deben acompanharlo y asi es como emborrache un par de noches seguidas al amigo japones...
Al dia siguiente por la manhana conseguimos un bus que nos llevase a Gondar, la primera ciudad mas o menos grande desde la frontera y un destino turistico importante, el camino de tierra y graba transcurria entre las montanhas, atravesaba aldeas, pueblos de chozas de adobe y cabanhas redondas de palos recubiertos de mierda de vaca, el cercado de uralita en los primeros y cuatro palos en los segundos, el paisaje realmente expectacular disculpaba las incomodidades de ir apretado entre campesinos en un bus destartalado dando botes a cada bache.
Despues de un par de noches en Gondar me despedi del japones y me vine a Bahir Dar donde logre salir de las telas de aranha "gringo buster" y me aloje en un hotel al mas puro estilo africano a buen precio, ya empezaba a ser hora de empezar a ver las cosas a mi aire, por aqui cerca esta una de las cascadas mas famosas de Etiopia donde el Nilo Azul abastece de electricidad a la zona, lo mas interesante para visitar en este lugar a parte del lago Tana.
Como soy un empanado y no llevo guia pensaba que estaba cerca de la ciudad y alquile una bici para ir hasta alla, como siempre, no encontre el camino correcto a la primera desviandome un buen cacho, preguntando me iban indicando, "sigue este camino y luego gira a la izquierda, esta despues del arbol mas grande", no se en que se parecera "waterfall" a "airport" pero acabe en el aeropuerto a unos 10km en el sentido opuesto...
Llegue al camino y despues de 9 km me dijeron que me faltaban 21, hasta las narices del pedal roto y del sillin que balanceaba y el que no podia apoyarme decidi dar la vuelta y volver a intentarlo en bus local.
Asi lo he hecho esta manhana sin problemas, me ha gustado mucho, no podia irme de Bahir Dar sin ver esto. Por falta de informacion y cabezoneria he tenido problemas a la hora de volver, habia mucha gente esperando un bus que tardaria demasiado en llegar y las furgonetas me pedian disparates por traerme de vuelta, asi que por no pagar mas he pasado de todos y he encarado con decision los 30 km del camino de vuelta.
Llevaba como una hora de caminata y se me ha pegado un chabal que decia tambien iba a Bahir Dar, justo al rato los buses de vuelta empezaron a pasar de largo sin hacer amago de parar, una vez llenos por lo general no dejan subir a nadie pero por un extrangero siempre hacen alguna excepcion y yo pretendia hacer uso de ese pribilegio, pero hasta que al cabo de un par de horas y mas de medio camino recorrido no se ha cansado de seguirme, y ningun bus ha hecho amago de parar.
Por suerte ha visto otros chabales jugando al futbol y ha preferido quedarse con ellos, una vez de nuevo en solitario me he montado en el primer bus pagando el precio justo por ello y me he sentido satisfecho aunque me ha costado 20 km de caminata, lo que me importaba es que no he pagado un birr mas de lo que costaba el trayecto, si sere cabezon...
Caminando me acordaba de los viajeros que atraviesan el continente a pie o en bici convirtiendo su vida en toda una odisea de rectas interminables entre aldeas y gentes que primero te miran como a un extraterrestre y seguido te piden dinero, desde luego, que paciencia, que merito, y que ganas de pasar la noche en cualquier lado.
Empiezo a recordar el poco amharico que aprendi en los meses que pase en Addis y voy saludando a la gente dejandoles sorprendidos, a pesar de ello no dejan de pedirme dinero, incluso a algunos se les nota que se deciden despues de haberse visto saludados... voy recordando tambien que lo unico que saben realmente en este pais es pedir.
Es imposible hablar con nadie sin que acabe por contarte que necesita dinero, la chicas se te declaran y se ofrecen pensando que las voy a convertir en reinas o algo parecido, tengo complejo de cartera andante y en ese sentido anhoro y valoro el caracter arabe que conoci en Sudan, son mucho mas compadres entre ellos, sin importar el estatus social entablan conversacion, se cuentas chistes e historias y demuestran tener un caracter mucho mas filosofico del que creemos pasando solamente por lugares turisticos y entre gente del oficio.
Sin embargo el Etiope es mucho mas clasista y solo hablara amigablemente con alguien de igual o mayor estatus, las furgonetillas de transporte rapido casi no recogen a nadie que no vista a lo occidental dejando tirados a cientos de campesinos en el camino, en los restaurantes llaman al camarero a base de aplausos o chasquidos de dedos, si es mujer casi ni la miran a la cara, y podria enumerar una larga lista de improperios, pero para que?
Cada pais es diferente y es lo que aprendemos cuando nos adentramos en diferentes culturas, me gusta sentir que descubro estas cosas, incluso que empiezo a querer este pais, y por que sera que este pais me gusta? Tendre que descubrirlo pronto...
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home